Los estudios continúan demostrando que la combinación de una dieta basada en plantas (¡incluida la chía!) junto con un estilo de vida saludable (ejercicio, salud mental, etc.) pueden ayudar a mejorar y mantener un corazón saludable.
No hay solo uno, sino tres nutrientes que se encuentran en las semillas de que podrían ayudar a la salud del corazón: omega-3 ALA (grasa saludable), fibra y antioxidantes.
De hecho, los estudios muestran que solo 2 cucharadas de semillas de chía al día pueden reducir los triglicéridos hasta en un 30% y 1 cucharadita de aceite de chía puede ayudar a reducir tanto el colesterol LDL “malo” como los triglicéridos en un 35%.
¿Sabías que durante el tercer trimestre de embarazo se empieza a formar la retina del feto (parte del ojo que permite la visión)?
Además, en este momento y durante los primeros dos años de vida es cuando el cerebro crece más. Uno de los componentes principales de estos dos órganos se llama DHA o ácido docosahexaenoico, un tipo de grasa omega-3. Nuestro cuerpo no produce DHA; por lo tanto, tiene que obtenerlo a través de los alimentos que comemos.
El alfa-linolénico (ALA), una grasa omega-3 presente en las semillas de chía, es el precursor del DHA; es decir, nuestro cuerpo crea DHA a partir de esta grasa. Por lo tanto, si estás embarazada o amamantando, consumir alimentos o suplementos que contengan ALA y DHA ayudará al desarrollo del bebé.
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